Ando un poco despistada con los desfiles esta temporada, ya ha empezado París y, salvo algunos desfiles de NY, no me he enterado de mucho. Aunque nunca es tarde.
Para lo que sí tuve tiempo fue para seguir las colecciones pre-fall 2009 que se presentaron hace pocos meses. No colgué nada sobre ellas, pero guardé fotos de algunas por curiosidad, para comprobar si realmente era un aperitivo de lo que íbamos a ver estos meses de febrero y marzo o no. En el caso de Balenciaga no parece que haya sido así.
Nicolas Ghesquière, en vez de apostar por un cambio, ha seguido fiel a su estilo. Mucho más suave que otras veces, como han destacado periodistas y bloggers, y con más guiños a Yves Saint Laurent (esmoquin, lazos, drapeados, pantalón de pinzas con blusa, grandes brazaletes dorados, etc.) que a Cristóbal Balenciaga, pero fiel a su estilo.
Vestidos casi iguales con el mismo estampado o parecido (Ghesquière ha comentado que en el caso del estampado de los vestidos se ha inspirado en el archivo de Balenciaga), pero en distintos colores. Una silueta que suele poner el acento en los hombros y eliminar las caderas -salvo cuando la curvas las crea él con volúmenes en la ropa-, y en general diseños que son variaciones de cuatro o cinco looks que van saliendo a la pasarela de manera consecutiva.
Las novedades de este año son, por un lado, la obvia referencia a un diseñador que no es el fundador de la casa y, por otro, cómo encontrar la inspiración en el Saint Laurent de los ochenta ha dado como resultado una colección menos agresiva que otras anteriores.
El caso es que todavía no me decido sobre si me gusta o no. Para Cathy Horyn una virtud de esta colección es que, desde el punto de vista de la ventas, todo es mucho más femenino que en otras ocasiones. Puede, pero me gustaría ver lo que llega a las tiendas y cómo llega, porque estos escotazos y las bandas semitransparentes que cubren el pecho no parecen, así a primera vista, un futuro éxito de ventas y menos en invierno. Al menos si las que van a comprar no son todas estilistas de moda y famosas buscando qué ponerse en la alfombra roja.
Y si va a retocar el escote de la blusas que ha sacado con los pantalones de color crudo, ¿no quedarán esos conjuntos mucho menos "modernos" de lo que pretende el diseñador? Quizá ése sea su mayor acierto: haber hecho un homenaje a Yves Saint Laurent arriesgando, sin intentar modernizarlo, sin pasarlo por el chino con la (innecesaria) intención de hacerlo parecer actual.
Para mí, aunque los colores -a excepción de los estampados de algunos vestidos-, no me emocionan nada y las faldas drapeadas me parecen horrorosas, la verdadera virtud de esta colección, incluidos los zapatos, es que va a gustar a muchas mujeres de distintas edades y no sólo por ser femenina.
Fotos de WWD.
2 comentarios:
Tu post está publicado!!!
buen fin de semana!
Gracias! Buen finde a ti también :)
Un abrazo
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